EL 3º MUNDO A TAN SOLO 14 KILÓMETROS DE MADRID
Los
medios de comunicación se hacen eco con frecuencia de noticias sobre la
lamentable situación que se vive en la
Cañada Real, pero ¿Qué es la Cañada Real? ¿En qué remoto país del mundo
podemos ubicar los hechos que nos narra la prensa y la televisión?
Se denominan cañadas reales a
aquellos caminos de
uso tradicional en la trashumancia en España. La Cañada Real Galiana, en su paso por la Comunidad de
Madrid acoge numerosos asentamientos
ilegales en donde se calcula que 8.500 personas, de los cuales aproximadamente 1.800 son niños, se amontonan en viviendas que van
desde bloques de pisos a chabolas a lo largo de 15 km de recorrido. Si bien
estos asentamientos en sus inicios se encontraban enteramente en el municipio
de Madrid, en la actualidad ocupan terrenos pertenecientes a los ayuntamientos de
Madrid, Rivas y Coslada.
La realidad de la Cañada Real es muy
heterogénea existiendo una gran diferencia de unos sectores a otros en el nivel
socio-económico y en lo referente al acceso a recursos. En algunos de estos
sectores, los más afectados por la precariedad y exclusión social, pueden
observarse unas condiciones deficitarias en infraestructuras, suministros,
servicios básicos, etc. que colocan a esta población en una clara situación de
desventaja social.
No podemos señalar a un único colectivo, que
por su raza, su idioma, categoría social, religión, etc. sea el foco de unas condiciones denigrantes,
pero sí que el rechazo social que estos colectivos pueden despertar en una
parte de la sociedad se ve a su vez potenciado por la confluencia de varios de
estos factores, lo que provoca no solo
la discriminación directa, si no una discriminación múltiple al operar
simultáneamente las diferentes opresiones y una discriminación interseccional
ya que dichos factores interactúan potenciándose entre sí. Tampoco podemos
olvidar, como así lo demuestran las declaraciones de algunos políticos, otro
tipo de discriminación que sufren los habitantes de la Cañada Real, como es la
discriminación por asociación; por el simple hecho de vivir en este lugar se le
relaciona con el mercado de la droga, los robos y otros hechos delictivos.
Nuestros prejuicios condicionan sus oportunidades laborales haciendo de esta
forma todavía más difícil salir de esta situación de desventaja.
El principio básico de igualdad de trato y no
discriminación reconocido en la Declaración Universal de los Derechos Humanos y
en nuestra Constitución brilla por su ausencia cuando volvemos nuestra mirada a
este entorno donde las carencias más básicas en materia de salud,
infraestructuras, vivienda acceso a recursos, etc…vulneran los derechos más
fundamentales colocando a estas personas en una situación de precariedad y
exclusión social e impidiendo su integración y el desarrollo personal completo
y satisfactorio.
Parece obvio, que todo esto es el resultado de
una falta de políticas públicas de vivienda e integración que arrastramos
durante años. Es necesario que desde las distintas administraciones públicas,
entidades e instituciones implicadas en función de sus distintas competencias y
responsabilidades sean conscientes de que solamente mediante el diálogo entre
ellas podrá diseñarse un plan de integración social que permita erradicar
completamente asentamientos como este que nos preocupan, nos entristecen y nos
avergüenzan a todos.
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